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UNIVERSIDAD, CIENCIA y TECNOLOGÍA Vol. 23, Nº 92 Junio 2019 (pp. 40-47)
EISSN 2542-3401
I.INTRODUCCIÓN
Los cambios sociales y tecnológicos a los que es-
tán sometidos la mayoría de los países, requieren otras
formas de crear y diseminar la información, puesto que
el mundo se mueve en torno a una economía y una so-
ciedad basadas en el conocimiento. En este aspecto, es-
tudios señalan que la Informática es una de las carreras
más demandadas a escala mundial, este campo apoya al
resto de las áreas, tanto en el ejercicio profesional como
en la construcción del conocimiento cientíco [1].
A través de los avances producidos en el ámbito de
la informática, se han desarrollado las Tecnologías de la
Información y Comunicación (TIC), las cuales han ve-
nido creciendo en las últimas décadas, con inuencias
de manera signicativa en la sociedad contemporánea,
en casi todas las actividades diarias se utilizan estas he-
rramientas, de manera tal que resulta difícil pensar la
vida sin ellas. La interconectividad, el procesamiento
electrónico de datos, la digitalización, la integración
de datos, voz e imágenes, el acceso a la información
a través del ciberespacio, han cambiado a la sociedad
en una sociedad informatizada, han producido cambios
profundos en la manera en que los individuos se comu-
nican e interactúan.
Por tanto, estos escenarios plantean que los estu-
diantes del área de Informática deben desarrollar habili-
dades para la resolución de problemas que les permitan
implementar sistemas de información, además de apro-
piarse de los adelantos cientíco y técnicos relaciona-
dos con las ciencias de la computación. En este sentido,
con el auge en el uso de computadoras por diferentes
organizaciones, una de las carreras solicitadas en Ve-
nezuela es Ingeniería en Informática, anunciado por el
Ministerio del Poder Popular para Educación Universi-
taria, Ciencia y Tecnología, “en el 2016, entre las áreas
de conocimiento más demandadas, con un 27% están
Ingeniería, Arquitectura y Tecnología” [2].
Desde esta perspectiva, es evidente que las univer-
sidades de hoy en comparación con las de años atrás
ya no sean las mismas, el modelo educativo debe ser
ajustado ante los cambios acelerados provenientes del
conocimiento y las características de la sociedad actual,
es imprescindible que la universidad responda a formar
personas capaces de aplicar sus talentos en un mundo
básicamente cambiante, preparados para desarrollar su
potencial de aprendizaje permanente, profesionales ca-
paces de dar respuestas antes los requerimientos que se
les plantean.
En este orden de ideas, los espacios educativos uni-
versitarios en Venezuela emprendieron un proceso de
restructuración, acorde con las exigencias del texto
constitucional y los requerimientos de la sociedad, a
través de la Misión Alma Mater, se formalizó la trans-
formación de Institutos y Colegios Universitarios de-
pendientes del Ministerio del Poder Popular para la
Educación Universitaria en Universidades Politécnicas
Territoriales, las cuales, se conciben como institucio-
nes vinculadas a las necesidades productivas, sociales
y culturales de espacios territoriales determinados (ciu-
dades, estados, distritos funcionales, provincias federa-
les), destinadas a democratizar el acceso a la educación
universitaria y dinamizar el desarrollo endógeno, y es
de allí donde surge la creación de los Programas Nacio-
nales de Formación [3].
Mediante los Programas Nacionales de Formación,
se desarrollan nuevos ambientes de participación social
y transformación de la educación; además de poseer
elementos resaltantes como la responsabilidad, la ética,
solidaridad, justicia, respeto al ambiente y a la vida y la
calidad como partes de un todo que subyace y se hace
presente en el producto o respuesta a generar.
Es así como, a nales del año 2011, en la Univer-
sidad Politécnica Territorial del estado Lara “Andrés
Eloy Blanco” (UPTAEB), se implementa el Programa
Nacional de Formación en Informática (PNFI), el cual
es un programa de formación basado en un conjunto
de saberes, prácticas y convivencias para lograr un pro-
fesional que maneje el tratamiento automatizado de la
información y su tecnología, con la intención de dar una
respuesta a las necesidades de formación en el área de
informática en consonancia con el Plan de Desarrollo
Económico y Social de la Nación, Plan Nacional de
Ciencia, Tecnología e Innovación, Lineamientos de Te-
lecomunicaciones e Informática y Servicios Postales y
la Ley de Infogobierno [4].
Sobre esa base, los cambios que sufre la sociedad
a nivel tecnológico, cultural, social, cientíco, político,
conducen a estar preparados para enfrentar estos retos.
Es por eso que los estudiantes del PNFI deben recibir
una formación idónea en el área de informática para
apoyar y fomentar la instalación, en su entorno local,
nacional e internacional, de un escenario propicio ge-
nerador de respuestas innovadoras que contribuyan con
la independencia tecnológica y el desarrollo endógeno,
sustentable y humano.
Sin embargo, hablar de Informática, implica hablar
de un proceso complejo y creativo, que ha sido abor-
dado desde diferentes paradigmas y se han planteado
diversas propuestas referentes a la mejor manera de
abordar los procesos de enseñanza y aprendizaje en ésta
área, que permita al estudiante el desarrollo de habili-
dades para la resolución de problemas de ingeniería en
informática [5].
Atendiendo a estas consideraciones, se arma que,
Sullin et al., Caracterización del estudiante en los entornos virtuales