Loor et al., El fomento de la música popular y la identidad cultural de los ecuatorianos
Salomón et al., Produc Jt ui v ai dn a Sd e dg eu lr ap 1r o, Fc re as no y me li tn Se ur oà ,r me z a2 s, aJ ul l aá nd Ce al as i ep r roa d2 u.cción
sumados a los fandangos y bailes de claro raigambre re-
Posterior a esa época surge con mucha fuerza el pa-
gional: costillar, sanjuanito, toro rabón, amor fino, etc., sillo, ritmo en el que se musicalizan poemas de gran-
y por supuesto el precolombino yaraví indígena, retoca- des expositores de la poesía ecuatoriana como Medardo
do por los mestizos.
Ángel Silva, José María Egas, Jorge Carrera Andrade,
Las danzas de origen europeo eran utilizadas por la Abel Romeo Castillo, y muchos otros. Grandes intér-
aristocracia criolla, mientras que los tonos regionales se pretes y compositores se destacan en el siglo XX, entre
usaban en las clases populares y medias de la población otros, Nicasio Safadi, Carlota Jaramillo, Julio Jarami-
urbana y rural [8].
llo, Olimpo Cárdenas, Los hermanos Miño Naranjo,
Los mestizos, como se lo reconoce a este grupo hu- Los Brillantes, Las hermanas Mendoza Sangurima,
mano, también mezclan su tradiciones y costumbres Las hermanas Arauz, Los hermanos Montecel, Máximo
constituyendo una heredad cultural que proviene de León, y muchos más. A inicios del Siglo XXI se puede
ambos ancestros; y es precisamente este proceso sin- incluir, con un pasillo remozado, a Juan Fernando Ve-
crético lo que da lugar a la manifestación de una cultura lasco, quien logra llegar con su interpretación especial-
mestiza, que, interrelacionando aspectos específicos de mente a la gente joven.
cada uno de sus antepasados, desarrolla ciertas caracte-
rísticas propias, que hacen de ella una cultura tradicio- género musical que muchos compositores la llaman
nal auténtica. música rocolera, constituida por un sinnúmero de géne-
Desde la década del 80 del siglo XX, aparece un
Durante los primeros años de la República se sienten ros populares que incluyen al pasillo, el vals, el bolero,
ciertos cambios en la música popular, producto de la li- la bomba del Chota, rancheras, etc., y que son de una
beración religiosa, se multiplican las bandas de pueblo, estructura extremadamente simple y de poca trascen-
las unidades militares crean sus bandas. En los salones dencia en cuanto a la renovación y desarrollo de dichas
del siglo XIX se bailan valses, polcas, mazurcas y pa- formas, así como también de sus textos, pero, no pode-
sodobles, música importada de Europa, música galan- mos negar que tiene gran aceptación a nivel popular,
te y ligera. La influencia del pasodoble español, de la especialmente en los sectores urbano marginal, zona
antigua polca europea y del corrido mexicano aparece rural y serranía. No se puede dejar de comentar otra co-
el pasacalle ecuatoriano, género binario de danza con rriente de música popular que es de origen peruano pero
texto, que al haber sido utilizado por la mayoría de los que tiene gran aceptación especialmente de la serranía
compositores nuestros, ha conformado cancioneros de ecuatoriana, esta es la denominada música chicha que
segundos himnos locales. Todas las ciudades, parro- es una música tropical o cumbia andina.
quias, habitantes propios de cada región, barrios, tienen
un pasacalle en su honor [8].
Ketty Wong [9], una guayaquileña que imparte cla-
ses de historia de la música europea, latinoamericana
En la referencia [8] se afirma que en las fiestas po- y cultura musicales del mundo en la Universidad de
pulares se escuchan también pasodobles y valses, pero Kansas, Estados Unidos, sostiene que existe una amplia
predomina la música mestiza que tendrá un mayor de- segmentación de entre los espacios y el público al rela-
sarrollo en el siglo siguiente: pasacalles, aires típicos. cionarlos con la música nacional, por eso, propone la
En los sectores campesinos e indígenas, se conserva revisión crítica de los fundamentos musicales de la cul-
un indeclinable amor por los acentos de instrumentos tura nacional, tomando en cuenta las representaciones
ancestrales: rondadores, pucunas, dulzainas, bombos, y de identidad de cada grupo étnico. Es importante abrir
por una música que, aunque suena triste para oídos ex- nuevos caminos y dejar abiertos muchos interrogantes
traños, continua teniendo una significación propia, ce- donde se establezcan más vínculos entre música, clase
remonial, para los herederos de quitus, cañaris e incas. y nación.
Obviamente estas expresiones musicales se encuentran
fuertemente influenciadas por más de tres siglos de do- una baja autoestima, se sienten inferiores en muchas
minación española. expresiones y productos otorgándole mayor valor a lo
Wong [9] considera que muchos ecuatorianos tienen
A finales del siglo XIX e inicios del XX, la revolu- extranjero, no siendo la excepción la música. Uno de
ción liberal dirigida por Eloy Alfaro, incide también en los factores es la poca presencia que tiene la música
la música, con la creación del primer conservatorio, en ecuatoriana en el exterior, lo cual constituye un signo
el que se forman académicamente varios ecuatorianos de alarma de una frágil identidad.
capaces de interpretar música de cámara y sinfónica in-
El pensamiento de Wong respecto a la autoestima lo
clusive a nivel internacional, pero, jamás abandonaron comparte con algunos autores, entre ellos Miguel Do-
sus raíces de la música popular.
noso Pareja [10], considera además, que Ecuador no tie-
ne una identidad cultural definida respecto a la música,
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UNIVERSIDAD, CIENCIA y TECNOLOGÍA Numero Especial Nº 02 2019 (pp. 171-176)