I. INTRODUCCIÓN
Las familias y las instituciones educativas son muy indispensables en el desarrollo personal, académico y
social de los educandos, la interacción entre escuela - hogar y viceversa, debe considerarse y fomentarse
significativamente, siendo la escuela, una de las encargadas en brindar protección a los estudiantes, teniendo
que evitar la exposición a situaciones de inseguridad o violencia; es decir, priorizando los principios
fundamentales para la convivencia escolar como el adecuado trato, la obediencia a la pluralidad, los mismos
derechos, la equidad, la solidaridad y a la solución de situaciones de manera armónica [1]. En este escenario
las cualidades de los padres representan una importante responsabilidad en la crianza de sus hijos y en la
disciplina [2]. En el contexto escolar, el progreso académico se mide por resultados de aprendizaje, que son
descripciones de las diversas situaciones en las que se encuentra el estudiante, en relación con los propósitos
de aprendizaje; esta información, ayuda a los profesores, estudiantes, padres de familias a conocer el logro de
sus competencias [3]. La UNICEF en relación con la convivencia educativa, ha planteado que los niños
menores de 15 años están en alto riesgo de sufrir distintas formas de maltrato físico y psicológico; por lo
tanto, cerca de 720 millones de niños se encuentran desprotegidos frente a esta violencia [4]. En el Informe
Nacional de Resultados PISA 2018, el desempeño en lectoescritura del Perú en comparación con las naciones
latinoamericanas, lo ubican en el primer nivel, en relación con matemática, sin embargo, la mayoría de los
países latinoamericanos están en el mismo nivel [5].
En este trabajo se ha analizado la relación parental de los niños y se ha buscado conocer si esta relación
influye en el desempeño escolar y en la vida social que los niños llevan en la escuela. De manera que se han
considerado tres aspectos clave en la infancia, que son la vida familiar y la vida escolar, donde esta última
incluye no solo la relación con los otros sino el desenvolvimiento académico y el alcance de competencias de
aprendizaje.
II. DESARROLLO
A. Relación Parental
Es el conjunto de situaciones que brindan los padres hacia sus descendientes; mencionadas revelaciones
pueden presentarse de forma positiva como también mostrarse de forma negativa; ya que es importante para
el desarrollo integral del niño [8]. Involucra tres componentes, el primero se basa en creencias y
conocimientos, que es el componente cognitivo; le siguen los sentimientos y emociones, dando pase al
componente afectivo y finalmente las vivencias de los comportamientos, que pertenecen al componente
conductual [9]. La interacción entre padres e hijos es necesaria e indispensable en la vida familiar por varias
razones fundamentales. En primer lugar, esta interacción contribuye al desarrollo emocional y afectivo de los
niños, proporcionándoles un sentido de seguridad, pertenencia y apoyo emocional. El vínculo afectivo
establecido a través de la interacción fortalece la autoestima y la confianza en sí mismos de los niños, creando
bases sólidas para su bienestar emocional a lo largo de la vida. Además, la interacción padres-hijos es esencial
para el desarrollo cognitivo y académico de los niños. El diálogo regular y las actividades compartidas
fomentan la curiosidad, el aprendizaje y el desarrollo del lenguaje desde una edad temprana. Los padres
actúan como modelos a seguir, brindando orientación y estímulo para el desarrollo de habilidades
intelectuales y cognitivas. Por otra parte, en el ámbito moral y ético, la interacción familiar proporciona una
plataforma para la transmisión de valores, normas y principios éticos. La comunicación abierta y la
participación activa en la vida de los niños permiten que los padres guíen en la construcción de un sistema de
valores sólido y ético, contribuyendo a la formación de individuos responsables y éticamente comprometidos
[10]. La participación parental, incluye todos los quehaceres que efectúan la formación de los hijos para el
progreso psicológico y cognitivo; además, los padres se preocupan por su salud y velan porque sus
necesidades básicas sean satisfechas proporcionando a sus hijos bienestar, alimentación, vivienda y
educación [11]; por tanto, mientras concurran elementos familiares y escolares que facilitan la superación del
aprendizaje, se convierte en un apoyo para los niños [12].
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ISSN-E: 2542-3401, ISSN-P: 1316-4821
Universidad, Ciencia y Tecnología,
Número Especial 2024, (pp. 49-57)
Jiménez K. Evaluación de la relación parental y el rendimiento escolar en niños de primaria